
CERDO

MAGRO DE JAMON, MAGRO DE PALETA, COSTILLA, CHULETAS DE CABEZAL, CHULETAS DE LOMO, CINTA DE LOMO, CABEZAL DE LOMO, SOLOMILLO, COSTILLA DE CORBATA, FILETES DE JAMON, PANCETA...
¿Tú también eres de las personas que evita la carne de cerdo por su «supuesto» alto contenido en grasa? Pues te comunicamos que te estás perdiendo un alimento que aporta grandes nutrientes en cada etapa de la vida y que, consumido de manera moderada, ofrece grandes beneficios que quizás desconozcas. Entre ellos, un alto contenido en proteínas de alto valor biológico, multitud de minerales como el potasio, fósforo, zinc y hierro y gran cantidad de vitaminas del grupo B como la B1, B3, B6 y B12. ¿Quieres conocer más beneficios de la carne de cerdo? Te los décimos todos
Beneficios nutricionales de la carne de cerdo
Como ya hemos dicho, la carne de cerdo tiene un gran contenido de proteínas de un gran valor biológico. Concretamente tiene una media de 43 gr por cada 100 gr. A esto hay que resaltar su moderado contenido en grasa, que es menor que el que la gente piensa, ya que la media es del 9%.
También hay que tomar en cuenta la cantidad de vitaminas que posee, entre ellas la vitamina B6, niacina o B3, rivoflavina o B2 y B12. Todas ellas vitales para mantener una buena salud. Sin olvidar los minerales que contiene, entre los que destacan el hierro, zinc, fosforo, magnesio y potasio.
Beneficios para el organismo
La cantidad de grasa que aporta la carne de cerdo tiene que ver de la zona que se esté consumiendo. La parte que menos grasa tiene es el lomo, que sólo alcanza el 3%. Aparte es fácilmente digerible, ayuda a la creación y desarrollo de tejidos y músculos y nos mantiene más activos y llenos de vitalidad. Sin olvidar que favorece el equilibrio en el sistema nervioso.
Beneficios de la carne de cerdo según la edad
La carne de cerdo permite mucha diversidad de cortes y productos que se adaptan perfectamente a las diferentes necesidades fisiológicas y patológicas de cada persona, así como a las necesidades nutricionales según la edad.
Durante la niñez aporta proteínas de alto valor biológico vitales para el crecimiento y desarrollo de los huesos. Es una carne de muy fácil digestibilidad que aporta vitaminas B6 y B12 que ayudan al funcionamiento normal del sistema inmunitario. Además contiene fósforo que favorece el buen mantenimiento de los dientes.
Durante el embarazo y la lactancia incrementan los requerimientos nutricionales, por lo que la carne de cerdo es perfecta para ayudar a las mujeres a cubrir esas necesidades debido a su alto porcentaje de proteínas, minerales y vitaminas que ayudan a regular la actividad hormonal.
Por otra parte, las personas de edad avanzada encuentran sus propiedades y beneficios en las proteínas que les ayudan a conservar la masa muscular y a mantener en buen estado los huesos. Además es una carne de muy fácil masticación y muy digestible, algo muy importante en esta etapa de la vida.
Por último, por el desgaste que llevan los deportistas, necesitan también cubrir unas necesidades nutricionales específicas y la carne de cerdo magra, con un alto contenido proteico, les garantiza un importante suministro de aminoácidos esenciales y un gran aporte de vitaminas del grupo B que les ayuda a disminuir el cansancio y la fatiga. Además los minerales como el hierro, el zinc y el potasio contribuyen al adecuado funcionamiento de los músculos.
La carne de cerdo, y los productos cárnicos en general, tienen un lugar muy destacado en nuestra dieta por sus características nutricionales y por nuestra tradición gastronómica. Como muchos otros alimentos, contiene grasas, por lo que es importante que no se abuse de su consumo. Aparte de esto, y como has podido comprobar en este artículo, los beneficios de la carne de cerdo son muy variados. Antes que demonizar un alimento, es necesario conocerlo primeramente en profundidad. Además, con el gran sabor que tiene, ¿cómo resistirse?




